Rosy RAMALES
Salvo disposición en contrario, en la sesión ordinaria de este martes el Congreso del Estado de Oaxaca va a aprobar la iniciativa de reformas a la Ley de Revocación de Mandato estatal.
La aprobación se prevé desde el dictamen mismo, pues éste es declarado procedente por la Comisión Permanente de Democracia y Participación Ciudadana. Además, en la sede legislativa no hay señales de lo contrario, al menos por el momento.
Conforme el dictamen, no se reduce el umbral de firmas ciudadanas para solicitar el proceso de Revocación de Mandato; queda en el 10%. Incluso, a nivel municipal, que sería como lo nuevo reforzando la disposición.
Pero sí se reduce el plazo para solicitar el inicio del proceso de Revocación de Mandato; ya no sería durante los tres meses posteriores a la conclusión del tercer año del periodo del gobernador, sino durante el mes posterior.
Algo de lo bueno, es que el dictamen precisa el tiempo en que el Instituto Estatal Electoral y de Participación Ciudadana de Oaxaca (IEEPCO) emita los formatos de recolección de firmas ciudadanas: Durante los primeros diez días del mes de octubre.
En la ley vigente hasta el momento, no solo no se precisa, sino que es confuso.
También se precisa la pregunta motivo de la consulta, así como un plazo de tres días para que el IEEPCO emita la convocatoria para el proceso de Revocación de Mandato.
Por otra parte, se acorta el plazo para la verificación de las firmas de la ciudadanía solicitante del proceso de Revocación de Mandato: De treinta días, a diez días.
Grosso modo, así vienen las reformas a la Ley de Revocación de Mandato, propuestas en su mayoría por la “oposición”, principalmente por el único diputado del PRI, Javier Casique Zárate, de quien se dice pactó con la bancada de Morena para pasar como suyas diversas propuestas de reforma a la citada ley.
Así que hoy Casique ‘cortará rabos y orejas’. Más bien Morena, vía Casique. ¿O no?
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