CRÓNICA POLÍTICA: Oaxaca, ¿despenalizó o no el aborto?

Rosy RAMALES

La “despenalización” del aborto convirtió ayer a Oaxaca en la segunda entidad del país en aprobarla, al “reformar” los artículos 312, 313, 315 y las fracciones II, II, IV del Código Penal para el Estado y adicionar la fracción V al artículo 316, para permitir la interrupción del embarazo hasta las 12 semanas de gestación.

Pero ¿en verdad la LXIV Legislatura del Congreso Local “despenalizó” el aborto? La duda cabe por las siguientes consideraciones:

Una: No reformó previamente la Constitución Política Particular, en cuyo artículo 12 se establece que: En el Estado de Oaxaca se protege y garantiza el derecho a la vida. Todo ser humano desde el momento de la fecundación entra bajo la protección de la ley se le reputa como nacido para todos los efectos legales hasta su muerte natural.”

El precepto constitucional sigue intocado porque el dictamen correspondiente no fue sometido a consideración del pleno porque el presidente de la Mesa Directiva, César Morales Niño, suspendió la sesión argumentando falta de condiciones.

El recinto legislativo estaba anegado grupos de feministas y religiosos que acudieron a manifestarse a favor y en contra, respectivamente. Sin embargo, en ese momento ya había pasado lo más álgido; entonces ¿cuál fue la falta de condiciones? No se reunió la mayoría calificada.

A la bancada de Morena y aliados se les fue de las manos (aparentemente), aún cuando en conjunto la reúnen de sobra: Son 26 diputados morenistas, tres del PT y dos del PES; 31 en total y necesitaban 28.

Los números se hicieron evidentes en la votación a la reforma al Código Penal: 24 a favor y 10 en contra; éstos de la oposición a Morena: PRI, PAN, PVEM y uno de Morena. Así, los morenistas a duras penas reunieron la mayoría simple para votar las modificaciones al referido código sustantivo.

Incluso, varios diputados de Morena se abstuvieron de votar la “reforma” legal.

Dos: Se alteró el orden para someter a consideración del pleno para su discusión y aprobación, en su caso, las reformas al artículo 12 de la Constitución Política Particular y a diversos preceptos del Código Penal; primero debió avalarse la reforma constitucional y luego la relativa a la ley secundaria, pero  aquella, como ya se dijo, ni siquiera pasó por el pleno legislativo.

Tres: El presidente de la Mesa Directiva suspendió la sesión, no declaró un receso para continuarla posteriormente. Incluso, habría dicho “damos por concluida la sesión porque no existen condiciones para continuar”. Por lo tanto, queda en tela de juicio la validez de lo aprobado.

Cuatro: Lo descrito en los tres puntos anteriores son acciones y omisiones que vician el proceso legislativo y ponen en tela de juicio la validez de la “aprobación de la despenalización del aborto”, que ayer tanto cacareó la bancada de Morena (con excepción de los diputados de la misma que se abstuvieron o votaron en contra). Así que dicha “reforma” es impugnable.

¿PLAN CON MAÑA?

Los vicios en dicho proceso legislativo como el votar primero el dictamen a la reforma al Código Penal de Oaxaca sin previa reforma constitucional, suspender la sesión en vez de declarar un receso y hasta la caída momentánea del sistema de votación vía tablero, ¿reflejan falta de pericia del presidente de la Mesa Directiva del Congreso de Oaxaca, César Morales Niño (PT), o del secretario de Servicios Legislativos, Jorge Abraham González Illescas (PRI)?

¿O fue plan con maña del primero (o de ambos) para una de las dos cosas siguientes?

Una: Aprobar la reforma al Código Penal para forzar así la “despenalización del aborto” ante la imposibilidad de reunir la mayoría calificada para la reforma constitucional correspondiente.

Dos: Hacer como que despenalizaron el polémico tipo penal, para que al final la “reforma” a esta ley secundaria no pueda entrar en vigor y así evitar el costo político-electoral para Morena en una entidad aún conservadora en relación al tema.

¿QUÉ HARÁN?

No es la primera vez que el Congreso de Oaxaca vicia el proceso legislativo, y lo aprobado en el mismo se cae mediante impugnación o queda firme porque nadie impugna por acuerdo entre las bancadas o porque le dio firmeza una resolución jurisdiccional basada en derechos humanos.

En el caso de la reforma al Código Penal para despenalizar el aborto, tan cacareada por Morena, pero cuya validez está en tela de juicio, ¿qué hará el Congreso y el Poder Ejecutivo? ¿La harán vigente? ¿Sin haber reformado el artículo 12 de la Constitución Particular donde se garantiza el derecho a la vida desde el momento de la fecundación?

¿Aplicarán la reforma penal bajo el argumento del principio pro-persona?

¿Qué hará el Legislativo? ¿Reanudará una sesión suspendida o concluida para aprobar la reforma constitucional? No sería la primera vez que así procede en medio del silencio cómplice de la mayoría de los diputados.

EL COSTO PARA MORENA

Oaxaca es una entidad proclive a la izquierda en materia político-electoral. Sin embargo, en temas como el aborto buena parte de la sociedad es conservadora, todavía no es tan liberal como la sociedad de la Ciudad de México, por ejemplo.

En el Congreso Local ayer se manifestaron grupos de feministas y religiosos, a favor y en contra de la despenalización del aborto, respectivamente. Pero hay oaxaqueños que permanecieron callados y se expresarán en las urnas electorales.

Sin duda, para las y los diputados de Morena y para este partido político tendrá costo político-electoral la discutible aprobación de reformas al Código Penal de Oaxaca para despenalizar el aborto, aun cuando no sería de manera generalizada, sino solo en los siguientes supuestos:

Cuando el embarazo es resultado de una violación o de una inseminación artificial no consentida; cuando de no provocar el aborto, la mujer corra peligro en su salud o de muerte a juicio del médico que la asista, y cuando se diagnostique que el producto presenta alteraciones genéticas o congénitas.

No obstante, el polémico tema dividió no solo a los diputados morenistas (que no consiguieron la mayoría calificada para la reforma constitucional), sino también a la sociedad oaxaqueña. Claro, en toda sociedad siempre habrá ciudadanos a favor y en contra; a veces más, a veces menos.

No obstante, es espeluznante la imagen ensangrentada que circuló en redes sociales de diputadas de Morena, sobre todo de Eliza Zepeda, de Magaly López y de Carina Espino, integrantes de la Comisión Permanente de Administración y Procuración de Justicia, así como de Laura Estrada, presidenta de la Junta de Coordinación Política.

En un próximo proceso electoral, probablemente esa imagen sea usada como bandera en contra de Morena, que como partido tampoco escapó de los señalamientos de atentar contra la vida; aunque, por otro lado, los grupos en pro del aborto, lo destacaron como el partido a favor del derecho a decidir de las mujeres para evitar la muerte de mujeres.

En fin, a ver qué pasa.

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Correo: rosyrama@hotmail.com

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