Raúl CASTELLANOS
“ESTA ES UNA GUERRA QUE NADIE PODRÁ GANAR”; “lo que no se vale es la hipocresía y la doble moral de quienes condenan el terrorismo al mismo tiempo que justifican el de los Estados” –Rigoberta Menchú dixit-; “la industria norteamericana de armamentos practica la lucha contra el terrorismo vendiendo armas a gobiernos y grupos terroristas, cuya única relación con los derechos humanos consiste en que hacen todo lo posible por aniquilarlos” –Eduardo Galeano-; las crónicas dan cuenta “el belga Abdel Hamid Abaaoud considerado el cerebro de los atentados terroristas de París, fue identificado como uno de los terroristas muertos el miércoles en el asalto de Saint Denis”, el operativo duró varias horas, la zona en un kilómetro a la redonda fue aislada, en el lugar se encontró un arsenal; por lo que se advierte, además de contar con militantes sembrados en todo Europa –por no decir el mundo- el Estado Islámico cuenta con recursos ilimitados para financiar sus ataques; recién en la Cumbre del G-20 Vladimir Putin que no es una “perita en dulce” en cuanto al tema del respeto a los Derechos Humanos, denunció en rueda de prensa que “entre los 40 países que financian al Estado Islámico se encuentran varios miembros del G-20”, con los que minutos antes había compartido, el micrófono, la sal, el vino y se tomaron la foto; también reveló haber presentado imágenes satelitales y tomadas por aviones rusos, en las que se “muestra claramente la magnitud que alcanza el tráfico ilegal de petróleo por parte del EI, las columnas con los camiones cisternas se extendían por decenas de kilómetros” concluyó; en el mismo sentido, la BBC realizó un reportaje en el que describe las seis principales fuentes de financiamiento del EI, que –a su juicio- ha rebasado con mucho el que llegó a tener Al Qaeda en su “mejor momento” cuando vivía Osama Bin Laden; ingresos directos, miles de donantes privados que depositan vía internet en cuentas ocultas bajo claves especiales, organizaciones “benéficas” islámicas del Medio Oriente, gobiernos Islámicos con intereses geopolíticos específicos, en especial Arabia Saudita y Qatar, benefactores Sunitas involucrados en la lucha por derrocar al presidente sirio Bashar al Assad, perteneciente a la secta alauita del islam; petróleo, dice la BBC “el departamento del Tesoro de Estados Unidos estima que en 2014, el Estado Islámico pudo haber obtenido ingresos semanales por varios millones de dólares, hasta US$100 millones, por la venta de petróleo crudo y productos refinados de los “pozos expropiados”, a intermediarios, quienes a su vez lo contrabandeaban a Turquía e Irán o incluso se lo revendían al gobierno Sirio –para ripley-; secuestros, según estimaciones, en 2014 este “rubro” les generó a los yihadistas US$20 millones en pagos por rescates, un desertor reveló que la organización dispone de un “departamento” especializado en el tema –no es broma- al que denominan “aparato de inteligencia”, su blanco favorito son periodistas extranjeros que en busca de la nota se trasladan a ciudades sirias cercanas a la frontera con el territorio bajo control del “Califato”, además de ser, el secuestro y las ejecuciones de quienes no pagan, una poderosa herramienta de propaganda; robo, saqueo y extorsión, está por demás decirlo, que tales “acciones” son comunes contra quienes viven en las regiones bajo su control, cruzan por la zona o les contratan protección para negocios, tales como el contrabando de petróleo, armas, víveres, medicamentos o tráfico sexual, otra lucrativa fuente de ingresos es la venta de obras de arte, saqueadas de monumentos históricos antes de destruirlos; impuestos a la minorías religiosas, obligadas a pagar el “jizya” a través de contratos, aunque en su mayoría a la fecha ya se han “convertido” ante el temor –real- de ser ejecutados; esclavitud y tráfico sexual, son miles las mujeres, niñas y jóvenes vendidas como esclavas en el mercado negro sexual internacional, pero también se les utiliza como elemento de propaganda para atraer jóvenes y premiar combatientes; como se advertirá, tienen razón los politólogos y analistas, esta es una guerra que nadie podrá ganar, en la que todos perdemos…es viernes “hoy toca” –Dehesa dixit-, ¿alguien puede asegurar que esto ya está decidido?…
RAÚL CASTELLANOS HERNÁNDEZ / RCMULTIMEDIOS.MX