Si el PRI quiere ganar en 2016, “la unidad debe pasar del discurso a los hechos”: Rebeca Cervantes.

REDACCIÓN

Rebeca Cervantes, líder de la Corriente Crítica del PRI, dijo que en este partido no deben hacer “cuentas alegres” respecto de los resultados de las elecciones de diputados federales del pasado 7 de junio. Lo que es que “la unidad de las y los priistas debe pasar del discurso a los hechos”.

Ello, precisó, “si dejar de reconocer el esfuerzo y el trabajo de la Dirigencia del PRI en Oaxaca” y del Delegado del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), Fidel Herrera Beltrán.

No obstante, señaló: “La votación histórica de nuestro partido se ha visto minimizada en esta contienda, reflejo de un exceso de confianza y un gran descuido a nuestra militancia; nuestro voto duro.”

Continúo: “Como ejemplo te puedo dar datos del Distrito 8 en el que en el 2006, tuvimos 34 mil votos; en el 2009, 29 mil; en el 2012, 51 mil, y hoy en el 2015, 23 mil votos.

Y en la autocrítica, dijo: “¡Sabemos que no debemos confiarnos, en el hoy por hoy sabemos que hemos cometido errores y que debemos de corregirlos, que si queremos ganar el Gobierno en el 2016, la unidad de las y los Priistas debe de pasar del discurso a los Hechos. Debemos retomar el respeto a la institución que es el partido, a los liderazgos y a los tiempos!”

Cuestionada sobre si hubo traiciones en las elecciones, Rebeca Cervantes aludió: Creo q hay mas intereses personales que de partido. De los grupos, creo que no solo el PRI , sino todos al interior de sus partidos ya no hay convicción, solo acuerdos, y las y los ciudadanos también ya lo ven como quien les da mas. No lo ven como un proyecto de prosperidad”.

A pregunta expresa, consideró que los ex gobernadores no influyeron en la baja votación obtenida por el PRI, así como en las derrotas. Al respecto, precisó: “Me parece que la derrota y baja votación tiene muchas otras caras… La gente está harta de discursos lejanos a sus necesidades…La gente está harta de tanto desorden y violencia. La gente está harta de no escuchar una voz que le asegure una política distinta, a la de intereses personales, corrupción e inseguridad”.

 

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