Por el monitor ciudadano/ Colaboración.
El Tribunal Estatal Electoral propinó otro revés por las malas decisiones del endeble órgano electoral estatal, al ir de mal en peor en la aplicación de los procedimientos que legalmente le corresponden.
Resulta que este jueves el Tribunal Estatal revocó el acuerdo del Consejo General del IEEPCO que en días pasados emitió al negar el registro al nuevo partido político local denominado Renovación Social.
Dicho Tribunal consideró que la muy afamada Comisión Permanente de Partidos Políticos y Participación Ciudadana, que preside el supuesto erudito consejero electoral de nombre Gerardo García Marroquín, no cuenta con facultades para asumir lo que legalmente le corresponde a la Dirección de Partidos Políticos de ese órgano electoral. Con lo que queda claro que todo lo actuado por una autoridad que carece de competencia y que de pasada viola flagrantemente la garantía de audiencia, es nulo de pleno derecho.
Esos experimentos de apliación e interpretación de la norma electoral de consejeros electorales del IEEPCO, evidencían la muy mala decisión del INE en su designación, orientada por Marco Antonio Baños, el cual tiene el control total dicho órgano electoral del país y que actualmente es el operador político estrella del PRI a nivel nacional, porque a nivel estatal solo tiene como referente político al malogrado José Antonio Hernández Fraguas.
Todo ello, tiene al IEEPCO a la deriva, y que seguramente se hundirá en el próximo proceso electoral en donde se elegirá Gobernador del Estado, toda vez que no cuenta con el apoyo y respaldo de la mayoría de los partidos políticos.
Vaya paquete el que se aventó Gustavo Nágera Mexueiro actual consejero presidente del IEEPCO; haber como sale del asunto, pues solo tiene quince días para reponer el procedimiento de registro del nuevo partido y emitir otro acuerdo apegado a derecho.
Ojalá y a este limitado personaje no le esté pasando lo que le pasa a su homólogo del INE, porque sería vergonzoso que el que realmente dirija el barco sea el consejero Marroquín y el desdibunado Director General. Y eso parece, porque el Consejero Presidente se la pasa en “reuniones” y el “erudito” toma el control.
Hasta la próxima.
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